Pensar el lugar desde el cual nos pensamos, interrogarnos por el ser de la universidad desde dentro de ella y como un modo de habitarla: son cuestiones sobre las que Eduardo Rinesi insiste en el sumamente estimulante “Filosofía y política de la Universidad”, el libro de más reciente aparición de la colección que coedita el IEC con la UNGS.
El texto, que fuera recientemente presentado en la Universidad Nacional de La Pampa en un evento organizado por el Centro Pampeano de Estudios Políticos y Sociales y el propio IEC, recoge las reflexiones que el autor viene desarrollando y discutiendo desde hace un tiempo en torno a la idea de “derecho a la universidad”.
Se trataría de una afirmación asombrosa –una locura, según el propio Rinesi-, posible y comprensible solamente en el actual contexto político latinoamericano, que va en contra de la milenaria tradición elitista de la universidad. Pensar a la universidad como derecho, pensar el derecho a la universidad supone considerar la cuestión no solamente desde el punto de vista individual sino también desde el punto de vista colectivo, lo cual coloca la titularidad del derecho en el primer caso en el individuo, y en el segundo caso, en el pueblo.
Esta doble perspectiva del derecho a la universidad impone retos en tres sentidos, al entender de Rinesi: Mejorar, por un lado, la relación entre universidad y organizaciones sociales, políticas, territoriales, discutiendo qué universidad necesita el pueblo. Aprender, en segundo lugar, a trabajar más y mejor con el Estado; porque “si algo hemos aprendido en estos años, es el que el Estado es el necesario garante de los derechos que le reclamamos”. Y por último, la universidad debe implicarse más, mejor y con menos prejuicios en los grandes debates públicos, aprendiendo a hablar otros lenguajes.
Afirma Rinesi que la palabra “democratización” funciona hoy como organizador del discurso político, posibilitando recuperar y pensar como derechos cosas que nos habían sido arrebatas y otras que no las habíamos pensado así. Este libro es una pequeña gran contribución en ese sentido, un volver sobre sí -un ejercicio de re-flexión- sobre años de docencia, investigación y militancia en y por la universidad pública, buscando los modos de hacerla cada vez más amplia, más democrática y más participativa.